Después de haber pagado entre 80 y 280 euros por ver a Madonna en su show fin de gira en París, los fans esperaban algo más de espectáculo y, sobre todo, un concierto algo más extenso que los 45 minutos escasos que duró. Decepcionados, los fans la abuchearon y exigieron que se les devolviese el dinero de las entradas. Para lavar la imagen de Madonna, que quedó bastante dañada tras este incidente, su portavoz, Liz Rosenberg, ha emitido un comunicado justificando por qué el concierto duró tan solo 45 minutos. Su principal argumento es que, en los sitios con capacidad reducida, como es el caso de Olympia, en París, los conciertos nunca duran más de 45 minutos. Y que, en este caso, el concierto le costó a la organización casi un millón de euros. El comunicado expresa que ese concierto fue planeado por Madonna para dar las gracias a los fans franceses. Dice que, tras pasar por una gira agotadora, Madonna quería hacer este último esfuerzo para honrar la cultura y la historia de Francia, así como a sus artistas. Prosigue la justificación alegando que este concierto no estaba programado dentro de la gira MDNA Tour y que se hizo un gran esfuerzo por poner a la venta las entradas a un precio lo más bajo posible. Se resalta el hecho de que los conciertos más en 'petit comité' de Madonna nunca duran más de 45 minutos, y se enorgullece de haber hecho un buen concierto, que además se retransmitió en streaming a través de Youtube para los fans de todo el mundo.
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